El perfil del turista rural es un adulto con estudios superiores que quiere relajarse. Entre otras, estas son las conclusiones de un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Valencia sobre estrategias de marketing en el turismo rural.
La muestra para determinar el perfil del turista rural se llevó a cabo en las localidades de Belasú, Santa Pau y Pals (Cataluña), y determina que el perfil típico del turista o excursionista rural (este último representa el 60% de los casos) es una persona adulta, con estudios superiores, que busca desconectar, relajarse y visitar lugares nuevos, limpios, tranquilos y con patrimonio cultural.
Según el trabajo, la riqueza histórico-cultural, los sentimientos que despiertan, la limpieza y tranquilidad del entorno, el trato de la gente del pueblo, la armonía y el mantenimiento del estilo arquitectónico, las tiendas, la riqueza histórico-paisajística, la gestión turístico-cultural y la oferta turística complementaria son las claves de este modelo de marketing turístico y las señas de identidad del turista rural.
La importancia del turismo rural en Europa ha llevado a realizar esta investigación para crear un modelo de gestión que se publica en el último número de Tourism Management. El turismo realizado en núcleos de población españoles de no más de 2.000 habitantes, con riqueza arquitectónica, patrimonial o histórica ha sido el elegido para concretar el perfil del turista rural.